Crea mundos a trav&eacute;s de decorados. Trabaja para marcas globales sin resignar su estilo. La mezcla de elementos impensados, el truco para contar historias propias.

Micol Giulia Riva es escen&oacute;grafa y estilista. Antes de instalarse en el barrio Porta Venezia de Mil&aacute;n, itiner&oacute; entre Nueva York, Londres y Buenos Aires. Su madre es argentina; su padre, italiano. En sus recuerdos la moda siempre estuvo presente: las manos de su abuela Sarita, que confeccionaba ropa infantil, le transmitieron ese saber. Su bisabuelo era propietario de una f&aacute;brica de telas y su t&iacute;a abuela, Fortuna Dayan, due&ntilde;a de la boutique Caramell, en Quintana y Callao, punto clave de la moda en los 80. &ldquo;Todav&iacute;a conservo muchas de esas prendas que hered&eacute; y que me encanta usar. Recuerdo cuando ven&iacute;a a Europa en b&uacute;squeda de tendencias, y nosotros la acompa&ntilde;&aacute;bamos a las tiendas&rdquo;, dice Micol.&nbsp;
Ella crea mundos a trav&eacute;s de decorados. Lo hizo para campa&ntilde;as de Sephora, Bvlgari, Nike, Fila y Guess, entre otras marcas. Es consultora en moda, y fue asistente del equipo de vestuario de El capital humano, una pel&iacute;cula de Paolo Virzi. En Argentina, donde vivi&oacute; tres a&ntilde;os, gener&oacute; experiencias para Tramando y para Natalia Antol&iacute;n.&nbsp; Las pistas para descubrir su pasi&oacute;n por los sets y la utiler&iacute;a llegaron casi de casualidad, al comenzar su carrera, en un puesto como ayudante de escenograf&iacute;a de la revista Toilet Paper.&nbsp;

L&acute;OFFICIEL &iquest;C&oacute;mo llegaste a este oficio?
MICOL GIULIA RIVA: De chica me la pasaba sacando fotos a edificios. La arquitectura me gustaba&hellip; Me cost&oacute; mucho darme cuenta de que los estudios cl&aacute;sicos que cursaba no eran adecuados para m&iacute;. Y en alg&uacute;n momento, a mitad de la secundaria, decid&iacute; pasar a una escuela de arte. Quer&iacute;a ir a Londres porque ya ten&iacute;a muchos amigos all&aacute;, pero mis padres me mandaron a Nueva York, donde hice cursos de administraci&oacute;n de empresas y de ingl&eacute;s. Pas&eacute; seis meses en Nueva York, y me matricul&eacute; en el curso de dise&ntilde;o de moda de Marangoni Londres, que termin&eacute; en Mil&aacute;n.
L&acute;O: &iquest;C&oacute;mo se genera un estilo y se convierte en lenguaje visual?&nbsp;
MGR: Soy apasionada del dise&ntilde;o, sobre todo de las antig&uuml;edades modernas. Siempre fui habitu&eacute; de los mercados de pulgas: los empec&eacute; a visitar con mi madre durante nuestros viajes. Creo que es importante mezclar, combinar y crear un estilo propio para no convertirse en un lugar com&uacute;n. Siempre me atrajeron los objetos usados fuera de contexto, como los religiosos, y por eso los colecciono, aunque no est&eacute;n relacionados con la religi&oacute;n. Me parece natural mezclar elementos y mobiliario de dise&ntilde;o para tener un estilo original y contar una historia propia. Me gustan las l&iacute;neas minimalistas combinadas con algo inusual para hacerlo m&aacute;s divertido. &iquest;Un sof&aacute; blanco de los a&ntilde;os 70 junto con una rosa gigante rescatada de un set? &iexcl;Este es mi sal&oacute;n!&nbsp;

L&acute;O: Sos italiana pero ten&eacute;s conexi&oacute;n con Argentina a trav&eacute;s de tu madre. &iquest;C&oacute;mo pens&aacute;s el exilio y qu&eacute; significa para vos emigrar?
MGR: Es distinta mi experiencia al mudarme a diferentes pa&iacute;ses, buscar lo que realmente quiero, crecer y conocer culturas: yo pude elegir. Si ya es dif&iacute;cil tomar coraje para mudarte por elecci&oacute;n, debe ser complicado tener que dejar tu vida, lo que conoc&eacute;s y lo construido por necesidad. Mi mam&aacute; lleg&oacute; a Italia durante la dictadura militar, con solo 21 a&ntilde;os. Mi pap&aacute; es milan&eacute;s. Crec&iacute; con dos culturas en la misma casa que hoy conviven y forman parte de m&iacute;. Hay heridas que ni siquiera las d&eacute;cadas pueden sanar, y creo que es fundamental estudiar la historia para no repetir los mismos errores. En Argentina, como en Europa, estamos viviendo nuevamente tiempos dif&iacute;ciles. Cuando me instal&eacute; en Buenos Aires investigu&eacute; mi historia familiar e intent&eacute; conectar con mi familia de origen. Gener&eacute; lazos que contin&uacute;an hasta el d&iacute;a de hoy, y de los que estoy de verdad agradecida.&nbsp;

Escenógrafa de moda

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