Moda

Pierre Balmain, a 40 años de su muerte

Un repaso por la trayectoria del couturier.

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Aunque formó parte del selecto grupo de diseñadores de alta costura de mitad del siglo XX, Pierre Balmain difícilmente tiene la misma prensa que sus contemporáneos. Su nombre ahora es sinónimo de sensualidad, pero en aquél entonces las cosas eran distintas. 

Nació el 18 de mayo de 1914 en Saint Jean de Maurienne, una pequeña ciudad montañosa del sudeste de Francia. Se crió rodeado de telas gracias al negocio de cortinas de su padre y a la tienda de ropa que atendía su madre. Intentó estudiar arquitectura, pero al año ya había abandonado para dedicarse a la moda. Tras servir en el ejército francés durante la Segunda Guerra Mundial, regresó para empezar a trabajar con Lucien Lelong -otro destacado modisto francés- donde consiguió sus primeras experiencias en la construcción de indumentaria. En aquel atelier conoció a Christian Dior y rápidamente empezaron una amistad. Pierre quiso comenzar su propia marca junto a Dior y a pesar de que originalmente el plan estaba en marcha y Dior había mostrado entusiasmo, terminó rechazando la oferta y los dos se distanciaron acumulando sentimientos de traición que hicieron que casi no se volvieran a ver y de amigos pasaran a ser rivales.

En octubre de 1945 Balmain debutó con su primera colección y causó revuelo en la moda francesa. Cinturas marcadas, hombros redondeados y faldas con volumen fueron algunas de sus propuestas para contrarrestar la moda austera y masculina de la posguerra. Las mismas ideas que un año más tarde serían popularizadas por Dior con su New Look.  La escritora y coleccionista de arte Gertrude Stein que llevaba años usando su ropa, habló de una “nueva comprensión de lo que realmente era la moda” al describir aquel show

No se le atribuye el invento de nuevas siluetas ni conceptos particularmente revolucionarios, pero fue uno de los diseñadores más renombrados en la golden age de la alta costura. Esencialmente sabía lo que la mujer quería y cómo venderlo. Sus compañeros contemporáneos a menudo lo desestimaban porque en lugar de mantener el estilo y la tradición parisina tenía sus ojos puestos en el mercado norteamericano y contaba con clientas fuera de los círculos tradicionales de la alta costura nacional. En 1949 ya contaba con boutiques en Nueva York y perfumes con su nombre. La Jolie Madame de Balmain era elegante, chic, sobria y un poco conservadora. La sastrería, la calidad en los materiales y el refinamiento de sus prendas era lo que lo caracterizaba y garantizaba semejante volumen de ventas. 

Su clientela incluía los nombres de Marlene Dietrich, Katharine Hepburn, Sophia Loren y la reina de Tailandia. Como todos los couturiers del siglo pasado, Balmain también fue maestro de maestros. En 1954 con tan solo 17 años, Karl Lagerfeld comenzó a trabajar como aprendiz en la maison luego de ganar un concurso y estuvo bajo su ala por tres años.  Balmain se mantuvo al frente de su propia casa hasta su muerte el 29 de junio de 1982, cuarenta años atrás. 

Balmain: cuna de leyendas 

Luego del fallecimiento de Pierre, Erik Mortensen su mano derecha y compañero de toda la vida se hizo cargo de la casa manteniendo la esencia y estética de la marca. Sin embargo, la figura más emblemática en tomar las riendas de la casa fue Oscar de la Renta, que estuvo entre 1993 y 2002. Su perfil se adecuaba a la filosofía de Balmain, que prefería diseños simples y elegantes en contraposición a la opulencia de otras casas del momento. 

La gran transformación vino cuando el actual director creativo, Olivier Rousteing, reemplazó a Christophe Decarnin. Olivier no era un diseñador conocido pero supo darle una vuelta moderna y resignificar el nombre. Cambió el logo, tuvo colaboraciones con gigantes del retail como H&M y marcó la moda de los 2010 con el blazer que todas las IT girls tenían en sus armarios. 

A diferencia de Pierre, Olivier prefiere los vestidos con adornos y complejidades pero mantiene el gusto por la sastrería y la confección. El documental Wonder Boy de 2019 muestra un poco más sobre la vida y trabajo de Rousteing. 

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