El Museo de Arte de S&atilde;o Paulo marca un nuevo hito en su historia con la inauguraci&oacute;n de un edificio anexo que ampl&iacute;a su capacidad expositiva en m&aacute;s de un 60 por ciento.

La nueva construcci&oacute;n se ubica a escasos metros de la sede original, sobre la emblem&aacute;tica Avenida Paulista, y se integrar&aacute; al predio principal a trav&eacute;s de un pasaje subterr&aacute;neo de 40 metros de extensi&oacute;n, cuya finalizaci&oacute;n est&aacute; prevista para el segundo semestre de 2025. Los andamios y vallas sobre la acera de la Avenida Paulista dan cuenta de que el proyecto de conexi&oacute;n a&uacute;n est&aacute; en marcha pero, con un &uacute;nica entrada, se puede acceder a ambos edificios, que por ahora se comunican sencillamente al cruzar la r&uacute;a Ot&aacute;vio Mendes, que separa las dos edificaciones. De este modo, a la hist&oacute;rica sede elevada sobre pilares rojos, &iacute;cono de la arquitectura brasile&ntilde;a moderna, se suma el flamante edificio bautizado como Pietro Maria Bardi, en homenaje al primer director art&iacute;stico del MASP. A su vez, la sede original pasar&aacute; a llamarse Lina Bo Bardi, en honor a la arquitecta &iacute;talo-brasile&ntilde;a que la dise&ntilde;&oacute; en 1968 y dej&oacute; su huella indeleble en el paisaje urbano de la ciudad. El MASP alberga una de las colecciones de arte m&aacute;s importantes de Am&eacute;rica Latina, compuesta por m&aacute;s de 11.000 obras entre pinturas, esculturas, objetos, fotograf&iacute;as, videos e indumentaria de distintas &eacute;pocas y procedencias. Abarca producciones de Europa, &Aacute;frica, Asia y Am&eacute;rica, con piezas que cruzan siglos y continentes. Sin embargo, las limitaciones f&iacute;sicas de la sede original solo permiten mostrar poco m&aacute;s del uno por ciento del acervo, un desaf&iacute;o que motiv&oacute; la necesidad de expansi&oacute;n. La nueva ala representa as&iacute; mucho m&aacute;s que un logro arquitect&oacute;nico: es una apuesta por hacer visible lo que, hasta ahora, permanec&iacute;a escondido. Dentro del edificio original del museo se mantiene la exposici&oacute;n permanente de su colecci&oacute;n, desplegada en caballetes de cristal que parecen flotar en el espacio, en un montaje tan radical como po&eacute;tico, una suerte de ej&eacute;rcito de obras art&iacute;sticas. Las piezas -colgadas en paneles de vidrio montados sobre bloques de hormig&oacute;n- configuran un bosque transparente que rechaza las paredes convencionales y apuesta por un recorrido fluido, sin jerarqu&iacute;as ni direcciones fijas. Dise&ntilde;ados por Lina Bo Bardi, los caballetes fueron reemplazados en 1996, pero recuperados en 2015 en una operaci&oacute;n de restituci&oacute;n museogr&aacute;fica que revitaliz&oacute; el esp&iacute;ritu original del proyecto. Como en sus comienzos, las fichas t&eacute;cnicas est&aacute;n ocultas en el reverso, para que el visitante se enfrente a la obra sin interferencias ni mediaciones. El montaje, titulado &ldquo;Picture Gallery in Transformation&rdquo;, est&aacute; en constante rotaci&oacute;n, con piezas que entran y salen por pr&eacute;stamos, nuevas adquisiciones y curadur&iacute;as temporales, tal como se lee en el texto de sala. Tambi&eacute;n aqu&iacute;, se puede visitar hasta el 13 de abril la exposici&oacute;n "Historias de Diversidad LGBTQIA+", que re&uacute;ne m&aacute;s de 150 obras de diferentes per&iacute;odos y movimientos art&iacute;sticos, donde destaca la producci&oacute;n de la argentina La Chola Poblete. A metros del edificio principal, el nuevo espacio abri&oacute; sus puertas con una propuesta inaugural ambiciosa: cinco exposiciones simult&aacute;neas, reunidas bajo el t&iacute;tulo com&uacute;n &ldquo;Cinco ensayos sobre el MASP&rdquo;. El conjunto explora diferentes aspectos de la colecci&oacute;n y del desarrollo institucional del museo, desde sus or&iacute;genes hasta hoy. Entre las muestras, se destaca la videoinstalaci&oacute;n &ldquo;Isaac Julien: Lina Bo Bardi &ndash; Un enredo maravilloso&rdquo;, una reflexi&oacute;n audiovisual sobre la vida y el legado de la arquitecta. Tambi&eacute;n se presentan: &ldquo;Geometr&iacute;as&rdquo;, centrada en la vanguardia constructiva; &ldquo;Artes de &Aacute;frica&rdquo;, que ampl&iacute;a el horizonte decolonial del museo; una sorprendente selecci&oacute;n de obras de Pierre-Auguste Renoir; e &ldquo;Historias del MASP&rdquo;, que recorre los m&aacute;s de 70 a&ntilde;os de historia institucional con documentos, obras y memorias. La ampliaci&oacute;n del museo brasile&ntilde;o se da pocos meses despu&eacute;s de la &uacute;ltima edici&oacute;n de la Bienal de Venecia, donde Adriano Pedrosa -director art&iacute;stico del MASP- fue el primer curador latinoamericano en la historia del evento. Todo indica que es un momento clave para el arte brasile&ntilde;o y latinoamericano, que ha recobrado protagonismo a nivel mundial.

Fotograf&iacute;as: Leonardo Finotti.&nbsp;

Aperturas. Nuevo edificio MASP en São Paulo

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