La calle es el mejor escenario para Bárbara Arcuschin. Casi todos sus retratos están tomados en segundos. 

El ojo de <a href="https://www.instagram.com/barbiarcuschin/?hl=es-la">B&aacute;rbara Arcuschin</a> supo colarse en escenas de la vida cotidiana y hacer de eso su <a href="https://barbiarcuschinphoto.com/">marca</a>. Pronto, ella se convirti&oacute; en una referente de lo que se conoce como estilo callejero, con un delgado equilibrio entre la sensibilidad y la intuici&oacute;n.

-&iquest;En qu&eacute; momento empezaste a mirar por fuera de la belleza hegem&oacute;nica?

Creo que desde que agarr&eacute; una c&aacute;mara por primera vez. Recuerdo el 2006 con una de esas primeras c&aacute;maras digitales pocket, trabajaba en moda, como estilista. Justo emprend&iacute;a un viaje por Medio Oriente y Europa, y de ah&iacute; conservo intactos esos registros visuales: una se&ntilde;ora con pelos revueltos y un conjunto a rayas; un jud&iacute;o ortodoxo empujando un cochecito doble con mellizas de jogging y colitas altas con cintas rosa chicle; una mujer africana con su atuendo de mangas globo parada en una estaci&oacute;n de trenes en Roma; una pareja punk en medio del bullicio tur&iacute;stico. Y segu&iacute; con expatriados, trabajadores en mercados, personajes marginados.

-Ten&eacute;s un modo interesante de captar a personas que llamamos &ldquo;mayores&rdquo;&hellip;

Encuentro en muchos de ellos caracter&iacute;sticas &uacute;nicas, como su pelo, sus combinaciones osadas, con un toque de color o un estampado. Una imaginaci&oacute;n que jam&aacute;s podr&iacute;a haber llegado a la moda. Tienen una mirada al pasado, un clich&eacute; unido a algo absurdo que lo vuelve espectacular. A todo eso se le suma el paso del tiempo en sus facciones, &iquest;hay algo m&aacute;s aut&eacute;ntico?

-Se percibe una confianza con las personas retratadas y al mismo tiempo la sensaci&oacute;n de un instante robado &iquest;C&oacute;mo logr&aacute;s ese efecto?

El 90% son robadas, soy decidida, trato de involucrarme, estar dentro de ese escenario y encontrar esa mirada cuando puedo, haya consentimiento o no; pero es una sola toma y sale tal cual la ves. El otro 10% es con permiso. Si tengo un margen de tiempo y veo venir a la persona que me interesa retratar, pido permiso.

-&iquest;De qu&eacute; forma describir&iacute;as tu paso por la moda?

Muy enriquecedor. Es un espacio en el que me siento c&oacute;moda. Empec&eacute; a trabajar a los 19 a&ntilde;os en el mundo editorial y segu&iacute; vinculada tanto con las revistas como con las marcas. Experiment&eacute; no solo en mi carrera como estilista, sino tambi&eacute;n como fot&oacute;grafa. Adem&aacute;s, hice registros audiovisuales y campa&ntilde;as visuales. Se me abrieron muchas puertas. 

-&iquest;C&oacute;mo fue la experiencia de tus muestras?

Mi primera muestra fue en la galer&iacute;a Miau Miau en 2009. Se llam&oacute; Palito, bomb&oacute;n, helado. La segunda fue en lo que hoy es Beta Sur, ex Regia. La llam&eacute; Define Stranger y proyect&eacute; un video, casi sin cortes ni edici&oacute;n, sobre Nueva York. Transe&uacute;ntes en las calles de Manhattan, Brooklyn y Chinatown. Fotos de una monja y al lado Amanda Lepore, &iacute;cono del ambiente nocturno trans. En un televisor viejo m&aacute;s fotos proyectadas: una instalaci&oacute;n de zapatillas All Star, jeans Levi&acute;s y otros detalles estadounidenses. La &uacute;ltima, un poco m&aacute;s formal, en la galer&iacute;a Otero, fue minimalista, solo mostraba ocho im&aacute;genes. No suelo tener tanto contacto con mis fotos impresas hasta que llega una muestra y entonces soy casi una espectadora m&aacute;s. Cuando veo algo m&iacute;o que cobra dimensi&oacute;n y deja de ser virtual me emociona.

-&iquest;Cu&aacute;l es la reacci&oacute;n del p&uacute;blico?

Irreverencia, &iquest;empat&iacute;a? Muchas veces la gente me dice: &ldquo;Ay, vi a tal persona y me acord&eacute; de vos&rdquo;. Por ah&iacute; estoy caminando con mi hermana o mi novio y de lejos ya me avisen que ven a alguien a quien seguro voy a querer fotografiar.

Una fotógrafa en busca de personajes marginados

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